Yo no gozo con la U, con Alianza, con Cristal y menos con algún equipo fuera de nuestros límites, aquellos que la televisión por cable y tantos alienados se dicen fanáticos.
Admiro el buen fútbol sí. Admiro las genialidades de monstruos futbolísticos como la del interminable Ronaldo, o la potencia de Rooney, o esa facilidad con la que Lionel conduce el balón cual globo en mano, pero no encabezan mi prioridad futbolística.
Loco puedo parecer, pero el Cienciano de hoy, el Cienciano que casi baja el año pasado, o el Cienciano super campeón sudamericano y recopano, es el equipo que llevo en las venas.
No dejo de pensar en personajes tan desconocidos por muchos, pero que han sido fieles a esta camiseta que desde 1901 ha demostrado que el Cusco no es solo Machu Piccchu, sino además un club que "con dinero o sin dinero" viene para grandes cosas este año 2011.
Ojo que no soy Cuzqueño, y de serlo estaría orgulloso. Arriba Cienciano, este año campeonamos.
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